martes, 29 de noviembre de 2011



Me agota, eso puedo asegurarlo. Me deja vacía. Del revés. Sin aliento. “Uno hace lo que puede” El problema es lo que no se puede. Lo que nos queda grande. No importa cuánto tiempo emplees en hacerte a la idea. Que lo asumas. Que lo justifiques. Que intentes encontrarle sentido. Uno nunca está preparado para afrontar que le han destrozado la vida. Y aunque tengas que seguir, aunque no quede otra, algo en ti se rompe definitivamente. Te ata para siempre a ese momento.

(R.)

4 comentarios:

Anaid Sobel dijo...

Un corazón puede estar roto y aún así seguir viviendo.
Un alma puede estar vacía y aún así seguir vibrando.

Lo que no nos mata, nos hará más fuertes.

Erev dijo...

Ay.
Duele.

.A dijo...

siempre hay algo que nos ata.. que nos hace pensar en las ataduras..

Lorena Saiz Ruiz dijo...

No hay mas limites que los tu crees que existen, nunca seremos capaces de volar pero si nos metemos en el mar, salimos y luego nos vamos a casa y nos tumbamos en la cama, cerrando tendremos la sensacion de que planeamos.
La vida no es maravillosa, pero existen muchos consuelos.